domingo, febrero 11, 2007


Vuelve San Valentín
Ingrid Bergman y Harrison Ford, ¿tenían algo en común? Postales, amor y cine



F.Palacios 1962
En 1959 realizó El día de los enamorados.
La acariciadora voz de Mona Bell grabó esta canción a finales de los años cincuenta




Ninguna de estas películas acaba demasiado bien, más bien fatal. Es una de las formulas de elevar el amor a la perfección y de imaginar como hubiesen sido sus vidas de haber salido bien…. Casi casi, de seguir viendo estas pelis, o nos lanzamos y nos enamoramos ya. O lo más fácil y no se yo, si conveniente para la salud física y mental es enamorarse de un imposible, y al no correr peligro de ser correspondido, uno se embarca en esa esperanza que nunca llega. Es más probable que sea más duradero y por lo menos el dolor, la decepción, en definitiva el trauma si no sale bien, de eso no debemos preocuparnos…


¿Acaso no es el final trágico de Romeo y Julieta lo que la convierte en una obra inmortal?
En Casablanca si la Bergman se hubiese quedado con Bogart (espero que la hayáis visto todos) ¿Nos hubiese parecido igual de atractiva?
El puente de Waterloo, Lo que el viento se llevó, Tal como éramos, Memorias de África...y un largo etc. de maravillosas películas donde nos quedamos con las ganas de que la historia de amor que se nos cuenta se consuma y sean felices por siempre jamás...


Guerra, amor, lealtad y renuncia.
En Casablanca y La calle del adíos. Renunciar al amor de Ingrid Bergman es algo que transciende más allá de la comprensión. Pero renunciar a Harrisond Ford... Bueno, los valores son los valores. Aunque para encontrar gente de esa clase, o te vas al cine, o te enamoras realmente, pero enamorarte.
















Eso de felicitarnos para todo, es algo que desde tiempos remotos nos ha encantado. Mucho más encantados están los comercios y grandes almacenes que esperan con ansiedad desesperante los días del padre, de la madre, de la mujer, de la mujer trabajadora, reyes, papa noel, cumpleaños o santo, veinte y cinco años de pareja o cincuenta... La lista puede llegar a ser eterna. Tendríamos que resumirlo en un dia al año, por ejemplo celebrar cada año que el mundo sigue dando vueltas y sobre todo con nosotros dentro...No estaría mal.


La Belle et la Betê.Jean Cocteau 1946


Otra de mis bestias favoritas es Jean Marais en La Belle et la Bête.
Lo que ocurre es que esta bestia al contrario de King Kong, tenía trampa, ya que ocultaba un bello principe.


Bestias humanas hay un montón. Demasiadas diría yo.
Mañana será otro día

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