Yo no creo en los hombres, dijo sabiamente Sara Montiel.
Aurora Bautista poseída por Agustina de Aragón, luchaba contra ellos. El periódico más esperado: ¡LA GUERRA HA TERMINADO!
Paz, ¿existes en verdad?

Sé que soy bastante reiterativo con el tema de que al final todo vuelve, o se reinventa, o se copia (que de todo hay)
No vuelve el Elvis de principios de los años setenta, tampoco Ella Fitzgerald, ni la paz mundial, ni se acaba el hambre...probablemente no regresen nunca, ya que no tienen hogar desde hace décadas o siglos.




Estar en conflicto es algo que viene de lejos

Eso de matarnos los unos a los otros, parece ser el deporte favorito de los hombres desde los tiempos más remotos.
El mundo ha progresado, pero mantengo mis dudas si en lo esencial nos hemos quedado anclados a saber en que época.
Por la posesión de una tierra más fértil, por arrebatarse mutuamente ganado, pelearon grupos contra grupos y empezaron las primeras guerras…Y así hasta el día de hoy, en que el ganado se transforma en petróleo.


Tiempos primitivos



Circo romano



Edad Media


Principios del siglo XX


Numancia 133


La invasión de los Bárbaros. U. Cneca, pint. Copia de j.Segrelles
Roma, era como un poderoso imán, ya que guardaba riquezas procedentes de las victorias alcanzadas por sus legiones, y esto atraía como las moscas a la miel


Pizarro se apodera de Atahualpa. Año 1532


Dialogando para poner fin a La Guerra Ruso-Japonesa.
A cañonazo sabemos todos que se llega a todo menos a la paz, eso seguro.


La visión de un artista japones de la paz


Madrid, 30 Marzo 1943.
La revista Semana, públicaba el reparador y no menos desolador sueño de dos soldados

La portada más esperada





Los números de la II Guerra Mundial

¡Pongámonos serios!


Sarita Montiel perdió la confianza en los hombres, por eso en vez de eliminarlos, se caso con todos.


No fue el caso de Aurora Bautista, que poseída nunca mejor dicho entre Agustina de Aragón y la muñeca diabólica, lo intento solucionar a cañonazo limpio.


De nuestra raza...¡Que miedo!